Citazioni |
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Hemos recordado ya las “interdicciones del lenguaje” debidas a creencias o a otros motivos de índole religiosa; y, de una manera general, se puede decir que el hecho de que una comunidad lingüística pertenazca a una determinada comunidad religiosa implica la existencia de determinados fonemas (Trubetzkoy cita el caso del ambiente eclesiástico ruso, en el cual la g se pronuncia, no como oclusiva, sino como fricativa), así como de determinados giros sintácticos, etc. - Coseriu (1986), a pag.67
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